Vilá C. (1993)- ejemplares mayores de 1 año
Longitud media cabeza-cuerpo:
111,6 cm para N=30 machos (rango: 97,6 - 124,0)
106,5 cm para N= 16 hembras (rango= 94,1 - 117,0)
Longitud media cola:
38,0 cm en N=31 machos (rango= 28,7 - 42,2)
36,8 cm en N=16 hembras (rango= 29,5 - 46,5)
Altura media a la cruz:
68,5 cm en N=26 machos (rango= 60,0 - 77,0)
65,7 cm en N=12 hembras (rango= 60,0 - 70,5)
Peso medio:
33,1 kg en N=32 machos (rango= 25,0 - 41,0)
28,2 kg en N= 19 hembras (rango= 21,6 - 34,5)
El lobo es el mayor de los cánidos silvestres.
Su adaptabilidad, ha dado lugar a un amplio rango de distribución natural, como resultado de esto, existe una notable variabilidad entre las distintas poblaciones de lobos, que han evolucionado en regiones biogeográficas diferentes.
En lobos, respecto a dimensiones y peso, se observa que los valores de estos parámetros se incrementan con la latitud (Regla de Bergmamm).
El diseño y color del pelaje también manifiesta una gran variabilidad.
En Eurasia esta variabilidad en
diseño y color es más notoria en lobos septentrionales, los
lobos de la Península Ibérica y otros lobos meridionales de Eurasia muestran, en este aspecto, una
acusada convergencia fenotípica.
Dentro de su área de distribución mundial ocupa gran variedad de hábitats: taigas, tundras, páramos y estepas, bosques, regiones árticas, agro-sistemas…
En ambientes humanizados, como la Península Ibérica, la persecución a la que se vea sometida la especie es una característica determinante a la hora de seleccionar áreas de cría y refugio.
Además de la disponibilidad de agua y fuentes de alimentación, cobertura vegetal y la orografía.
En lugares donde la persecución humana es de baja intensidad, el lobo puede seleccionar áreas con escasa vegetación o/y orografía suave, aun tolerando cierto grado de presencia humana, siempre que no se le persiga (no es lo mismo presencia que persecución).
En lugares
donde sea acosado, seleccionará zonas más abruptas y/o con abundante cobertura vegetal, como áreas de refugio y cría.
En amplias zonas de España con densidades muy bajas de población humana, de las más bajas de Europa, gran disponibilidad de presas silvestres, abundante cubierta vegetal y orografías complejas, el lobo no es capaz de asentarse de manera estable, encadenando eventos de recolonización-reproducción-extinción recurrentes, durante décadas, debido, principalmente, a la persecución humana.
Generalmente el lobo consume presas silvestres, incluso en zonas con presencia de ganado vulnerable, abundante y disponible.
Se muestra más flexible cuando sus presas preferentes están ausentes o mantienen bajas densidades.
Ecológicamente el lobo es una especie clave en los ecosistemas que habita, proporcionalmente muy importante en relación a su abundancia.
De partida, existen múltiples combinaciones de asociación que han sido descritas (Mech y Nelson 1990) con individuos emparentados con uno o ambos miembros de la pareja reproductora.
Cuando una pareja de lobos adultos se reproduce con éxito se forma un grupo familiar de lobos.
La descendencia generalmente permanece con su padres de 10 a 54 meses, pero excepto en circunstancias especiales, toda la descendencia se dispersa (Gese y Mech 1991; Mech et al. 1998).
Los lobos ajenos al grupo familiar pueden acceder a este, por ejemplo, sustituyendo a uno de los reproductores, cuando este muere o desaparece, en otras ocasiones individuos no emparentados son aceptados en el grupo familiar, al menos temporalmente, suele tratarse de ejemplares jóvenes (1-3 años)- (Messier 1985b; Meier et al. Alabama. 1995).
En una determinada población de lobos, sometida a explotación cinegética, más del 21% de los lobos que se dispersaron en un periodo de 7 años fueron aceptados en otros grupos familiares-sociales (Ballard et al. 1987).
El periodo de permanencia de estos ejemplares “adoptados” en los grupos que les aceptan es muy variable.
Para reproducirse con éxito un lobo debe encontrar pareja y un territorio con suficientes recursos tróficos para alimentarlos a ellos y su descendencia, o entrar como sustituto en un grupo familiar ya establecido reemplazando a uno de los dos ejemplares reproductores…existen diferentes estrategias.
Los lobos se reproducen una vez al año, el celo suele producirse en marzo (entre finales de enero y principios de abril), tras 63 días de gestación tienen lugar los partos, generalmente en mayo (entre abril y principios de junio).
Las lobas paren entre 4-7 cachorros (Mech, 1970)/5,33 lobeznos (Blanco et al., 1990a), la media aceptada parece ser que es 5.
Los lobeznos permanecen en el cubil y son el centro de la vida social del grupo familiar, más avanzado su desarrollo son trasladados a zonas concretas, llamadas centros de reunión, donde permanecen hasta los 5 meses de edad, a partir de octubre/noviembre/diciembre se iniciarán los desplazamientos con los miembros del grupo familiar.
El lobo es un depredador social.
El número de individuos que forman parte del grupo familiar varía mucho a lo largo del año y de un año a otro, también es variable el grado de vinculación al grupo de los distintos ejemplares, siendo el núcleo de este, la pareja reproductora y los cachorros del año (si logran reproducirse con éxito).
Los lobos son animales territoriales.
Los grupos familiares de lobos se establecen en territorios que consideran propios y defienden frente a otros grupos/grupos familiares/individuos.
Los recursos de un territorio son limitados.
Dentro de un territorio existen áreas que se ocupan con mayor o menor frecuencia, estas áreas (áreas de campeo, áreas de máxima actividad, centros de reunión, cubiles, rendezvous…) pueden cambiar de ubicación a lo largo del tiempo.
Tamaños de territorio-área de campeo
Norteamérica:
80-1600 Km 2 (Mech-Boitani, 2003)
Europa: 100-500 km2 (Boitani, 2000)
Portugal: 51-890 km2 (Rio Maior- Álvares)
España: 100-892 km2 (Vilá et al, 1990),106-1.500 km2 (Blanco y Cortés, 1999/Cortés, 2001/Cortés y Blanco, 2003).
Datos que incluyen movimientos de ejemplares territoriales vinculados a grupos familiares, ejemplares en dispersión, ejemplares que mantienen una relación más laxa con su grupo familiar o con otros grupos, ejemplares integrados/vinculados en distinto grado grupos/grupos familiares, no integrados, sin vinculación concreta…
Se han descrito varias situaciones sociales en base al estatus y el uso del territorio, estas definiciones describen situaciones temporales concretas, no describen ejemplares.
En los territorios la cantidad de recursos es limitada, ergo el número de integrantes de los grupos de lobos también es limitado, no puede aumentar indefinidamente.
Aumento de las tensiones por el acceso al alimento y el acceso a la reproducción, son causa de dispersión de excedentes y los ejemplares ya maduros poco a poco van dejando el núcleo de la manada en busca de otros ejemplares con los que no estén emparentados, para poder reproducirse.
Ejemplares por grupo datos de la Península Ibérica
Verano:
7,1 (meseta del Duero) (Fernández et al, 2012)
8,47 (Cordillera Cantábrica) (Llaneza et al, 2012)
Invierno:
3,8 (Cordillera Cantábrica) (Fernández et al, 2012)
3,47 (Cordillera Cantábrica) (Llaneza et al, 2012)
Cambios estacionales: en verano están los cachorros del año; también mortalidad y dispersión.
Proceso de dispersión:
La recolonización compensa pérdidas, favorece la variabilidad genética y permite el reemplazo de individuos reproductores (Vilá, 1993).
Un lobo permanece en el territorio del grupo familiar donde nace, con el tiempo, puede realizar desplazamientos cada vez más largos y permanecer fuera durante más tiempo, regresar a su grupo, ser aceptado en otro, formar el suyo propio, permanecer divagante sin establecerse ni vincularse a ningún grupo, establecerse solo en un territorio propio, en pareja…lo puede hacer por periodos variables de tiempo o indefinidamente.
Pueden parecen
lobos en zonas alejadas del área de distribución habitual
de la especie, incluso cientos de kilómetros, estos pueden ser
lobos en dispersión.
Distancias de dispersión
Norteamérica:
8-354 km (máx 886 km) (Boitani,2000)
Escandinavia: 1.092 km (distancia máxima al lugar donde fue radiomarcado)
Presencia de la especie en los Pirineos y Monegros, a través de Francia.
En cualquier zona de la periferia del área de distribución del lobo, pueden aparecer ejemplares en dispersión.
Referencias:
Vilá, C. (1993). Aspectos morfológicos y ecológicos del lobo ibérico (Canis lupus Linnaeus, 1758). Tesis doctoral. Universidad de Barcelona.
García E. (2012) Ponencia: El lobo ibérico en el siglo XXI. Ecología, población y gestión. III Congreso do lobo ibérico.
Vicente Urios Moliner (1995) Eto-ecología de la predación del lobo (Canis lupus signatus) en el NO de la Península Ibérica.
Wolves Behavior, Ecology, and Conservation Edited by L. David Mech and Luigi Boitani The University of Chicago Press Chicago and London 3.